jueves, 9 de junio de 2011

Batalla de Lepanto

Bernini

Nacido en Nápoles en 1598.pronto empezó a trabajar para el cardenal Scipione Borghese, quien le convirtió en su protegido. De ésta primera época son las obras Cabra amaltea (1615), "Eneas y Anchises" (1618-19) y "Neptuno y Tritón" (1620) de claro estilo manierista por influencia de su padre. Por encargo del cardenal realiza "El rapto de Proserpina" (1621-2), "David" (1623) y "Apolo y Dafne" (1622-24), obras caracterizadas por una evolución de su estilo hacia la caracterización psicológica de los personajes, que esculpe repletos de fuerza interior, y la delicadeza de los acabados.Su estilo bebe de fuentes diversas, como Miguel Angel, el clasicismo greco-romano, el naturalismo de Caravaggio o el tratamiento de los rasgos corporales de Guido Reni. Su básica innovación consiste en acercar al espectador a la obra, haciendo a éste partícipe de la acción, rompiendo las fronteras tradicionales de la obra de arte. Es por ello considerado como uno de los creadores del Barroco. Las mejores muestras de su hacer son el Extasis de Santa Teresa y las tumbas de Urbano VIII y Alejandro VII en el Vaticano. También trabajó para Luis XIV, para quien realizó un excelente busto, si bien no intervino en la modificación del diseño del Louvre como inicialmente estaba previsto. Falleció en 1680.

martes, 7 de junio de 2011

Los Borrachos, El Triunfo de Baco

 Fue pintada para Felipe IV entre 1628-1629, siendo pagada el 22 de julio de 1629.Se ha supuesto que el tema mitológico y el aire divertido de la obra fueron sugeridos por Rubens, en aquellos momentos en Madrid. La escena puede dividirse en dos mitades: la izquierda, con la figura de Baco muy iluminada, cercana al estilo italiano inspirado en Caravaggio, y la derecha, con los borrachines, hombres de la calle que nos invitan a participar en su fiesta, con un aire muy español similar a Ribera. En esta obra, Velázquez introduce un aspecto profano a un asunto mitológico, en una tendencia que cultivará aún más en los siguientes años.

Retrato de Felipe IV

Velázquez fue el único retratistadel rey y cuando, en dos ocasiones, el artista se ausentó a Italia, nadie hizo retratos del monarca. Este retrato de tamaño natural muestra al rey con bigote, con vestidos de un esplendor no usual (habitualmente llevaba colores oscuros), y con el Toisón de Oro colgado de una cadena de oro.
El cuadro fue pintado después del primer viaje de Velázquez a Italia (1629-1631). El artista pintaba directamente sobre el lienzo, por lo que en algunas de sus obras pueden notarse alteraciones. El traje bordado está realizado con pinceladas ligeras y gran sutileza de color. Velázquez consideró que este retrato era importante, por el modo en que firmó en el papel que el mismo rey lleva en la mano derecha.El cuadro fue pintado después del primer viaje de Velázquez a Italia (1629-1631). El artista pintaba directamente sobre el lienzo, por lo que en algunas de sus obras pueden notarse alteraciones. El traje bordado está realizado con pinceladas ligeras y gran sutileza de color. Velázquez consideró que este retrato era importante, por el modo en que firmó en el papel que el mismo rey lleva en la mano derecha.

Vieja friendo huevos

Vieja friendo huevosEn primer plano vemos a una anciana cocinando unos huevos en un hornillo de barro cocido, junto a un muchacho que porta un melón de invierno y una frasca de vino. Ambas figuras se recortan sobre un fondo neutro, empleado para destacar aun más los contrastes entre la luz y la sombra, una de las características que le sitúan en la órbita delNaturalismo tenebrista. En la zona de la derecha contemplamos uno de los mejores bodegones del arte español, formado por varios elementos metálicos, vasijas de cerámica y una cebolla colorada.la suciedad del paño con el que se cubre la cabeza la anciana o el corte del pelo del muchacho nos trasladan al mundo popular que contemplaba a menudo Velázquez. Incluso se piensa que la anciana podría ser el retrato de su suegra, María del Páramo, mientras que el muchacho sería un ayudante de su taller, posiblemente Diego Melgar. Los tonos empleados indican el conocimiento de obras de Caravaggio, bien a través de copias bien de grabados; así destaca el uso de los tonos ocres y pardos que contrasta con el blanco, reafirmando ese contraste la utilización de tonalidades negras. La minuciosidad de la pincelada, a base de pequeños toques que apenas son apreciables, contrasta con la factura suelta de sus últimas obras como Las Meninas. Más intrascendente es el debate provocado entre los especialistas por la manera que la anciana prepara los huevos, afirmando unos que los está friendo, otros que los está escalfando y otros que los cuece.

Velásquez

Diego Velázquez realizó su aprendizaje en Sevilla, en el taller de Pacheco, con cuya se hija casó en 1617.Cuando todavía era un adolescente, pintó algunas obras religiosas (La Inmaculada Concepción, La Adoración de los Reyes Magos) con un realismo inusual y pronunciados efectos de claroscuro.También por entonces pintó inusitados cuadros de temática religiosa ambientados en escenarios cotidianos, como Cristo en casa de Marta o Cristo en Emaús.En 1623 Diego Velázquez fue llamado a Madrid por el conde-duque de Olivares, valido de Felipe IV, para que pintara un retrato del rey; tanto gustó la obra al soberano que lo nombró pintor de corte.Comenzó así para Velázquez una larga y prestigiosa carrera cortesana.Al genio sevillano se debe también una obra maestra de la pintura histórica, La rendición de Breda, pintada en 1634 para el Salón de Reinos del palacio del Buen Retiro de Madrid.De temática mitológica es así mismo la magistralVenus del espejo, el único desnudo femenino que pintó y uno de los pocos de la historia de la pintura española. Poco conocido fuera de España hasta el siglo XIX, Diego Velázquez es hoy considerado uno de los grandes genios de la pintura universal.

Zurbaran (cristo)

Cristo en la Cruz es un cuadro de Francisco de Zurbarán realizado en 1627. en 1627 pintó el "Cristo en la Cruz", obra que fue tan admirada por sus contemporáneos que el Consejo Municipal de Sevilla le propuso que se instalara en dicha ciudad en1629.El lienzo blanco, luminoso, que le ciñe la cintura, con su hábil drapeado contrasta dramáticamente con los músculos flexibles y bien formados de su cuerpo. Su cara se inclina sobre el hombro derecho. El sufrimiento, insoportable, da paso a un último deseo: la Resurrección, último pensamiento hacia una vida prometida en la que el cuerpo, torturado hasta la extenuación, pero ya glorioso, lo demuestra.
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