Esta obra fue encargada por la familia Cornaro para la capilla familiar en la iglesia de Santa Maria della Vittoria, coordinándose con una serie de relieves que flanquean la capilla.Apare representada en el momento en que se siente atravesada por el dardo del amor divino, que porta un joven ángel.Las diferentes texturas son muy variadas: la textura angulosa y variada de la toga de monja, la mórbida del cuerpo del ángel, la esponjosa de las nubes, buscando así recrear sensaciones pictóricas. Los pliegues son usados aquí del mismo modo que en San Longinos, utilizándose para destacar determinadas partes, ocultando y encorsetando la anatomía. El gesto del ángel se nos muestra como una pervivencia de las formas clásicas en la obra de Bernini.
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